Superar San Valentín

Como superar San Valentín con dignidad amorosa y sin sentirme culpable por no decirte que te quiero.
Hay cosas muy sencillas que limpian la conciencia amoril. No hace falta hacer ritual de corazones y peluches, pero con lo difícil que es estar enamorado... hay que celebrarlo!
Y con celebrar no hace falta hacer alarde público de globos metalizados, ni echar a la cesta de la compra una tarta en forma de corazón. Estar enamorado no implica necesariamente un mal gusto digno de vergüenza ajena. Sea lo que sea que hagas... que no te dé vergüenza, aunque esto necesite de un serio ejercicio de extrospección . Ese es el truco.


Manda una carta. Venga va, seguro que lo has hecho alguna vez. A mano, por supuestísimo (no creo que estés pensando escribirla en word y a comic sans!). Evita pasarla a limpio, mas de dos veces ya significa que no la vas a enviar nunca. Más vale un borrón. Así que venga, juégatela. Un sobre y un par, de sellos, claro... y al buzón. Aún llegas a tiempo.


Hay una verdad universal, los recursos caseros son románticos. Si vivís juntos por la razón de que es vuestra casa, las cuatro paredes testigos de la historia de amor. Y si no lo es. porque por una vez podéis jugar a que lo sea. Un planazo fácil es un baño de dos, o ducha de dos, en la que el uno baña al otro. Y una cena hecha a cuatro manos, en la que uno da de comer al otro. Me encantó ver lo bien que funciona este juego en este repor.


Lo ideal, que creo que nos gusta a todos, es una escapada, un viajecito para los mas afortunados, pero con la que cae ahí fuera, en todos los sentidos, a ver quien es el guapo que asoma la patita por debajo de la puerta. Pero si una oferta se cruza en el camino, aunque no sea París, es muy difícil decir que no.
Oviedo, por ejemplo, es un buen plan. Y esto es un ofertón. No perdáis de vista esa página, ya es vox populi en los favoritos, pero si no la conoces ya te respondo; de nada.


San Valentín puede ser, una confabulación de la sociedad contra los solteros. No nos olvidemos de ellos, que también los queremos. Hace unos años Laura me pidió para sus amigas unos jabones Príncipe Azul, un príncipe que se deshace en tus manos y se derrite con tu cuerpo. ¿Es genial o no?



Y por último, unos minutos publicitarios. En www.oliviatheshop.com tenéis un montón de cosas bonitas para hacer regalitos y si queréis, acompañar esos momentos san valentineros, salir airosos y con éxito. ¡Feliz San Valentín!




♫ You & Me Song – The Wannadies